La diabetes tipo 2 es una enfermedad multifactorial, esto quiere decir que más que depender de una sola causa, depende de la combinación de distintos factores internos y externos a nuestro organismo para desarrollarse. A continuación se enlistan los más importantes:

  • Peso. Tener sobrepeso u obesidad es un riesgo principal.
  • Edad. Tu riesgo de diabetes tipo 2 aumenta a medida que envejeces, especialmente después de cumplir 45 años.
  • Inactividad. Mientras menos actividad realices, mayor será tu riesgo. La actividad física te ayuda a controlar el peso, utiliza la glucosa como energía y hace que tus células sean más sensibles a la insulina.
  • Antecedentes familiares. El riesgo de diabetes tipo 2 aumenta si tu padre, tu madre o algún hermano la tiene.
  • Raza y origen étnico. Aunque no está claro por qué, las personas de ciertas razas y etnias, incluida la afroamericana, hispana, nativa americana, asiática americana e isleña del Pacífico, son más propensas a desarrollar diabetes tipo 2 que las personas blancas.
  • Niveles de lípidos en la sangre. Un mayor riesgo está asociado con niveles bajos de lipoproteínas de alta densidad (HDL), o colesterol “bueno”, y con niveles altos de triglicéridos.
  • Distribución de la grasa. El almacenamiento de grasa principalmente en el abdomen, el riesgo de tener diabetes tipo 2 aumenta si eres hombre con una circunferencia de la cintura superior a 101 centímetros o si eres una mujer con una medida de más de 88 centímetros.
  • Prediabetes. Es una condición en el cual tu nivel de glucosa sanguínea es más alto que lo normal, pero no es lo suficientemente alto como para clasificarlo como diabetes. Si no se trata, suele avanzar hasta convertirse en diabetes tipo 2.
  • Riesgos relacionados con el embarazo. Tu riesgo de padecer diabetes tipo 2 aumenta si tuviste diabetes gestacional durante el embarazo o si diste a luz a un bebé de más de 4 kg.
  • Tener síndrome de ovario poliquístico. Es un trastorno frecuente caracterizado por períodos menstruales irregulares, crecimiento excesivo de vello y obesidad.
  • Acantosis Nigricans. Zonas de piel oscurecida, por lo general en axilas y cuello. Es un signo que aparece cuando existe resistencia a la insulina.